Hay quienes han intentado ser madres y no lo han conseguido. Quienes han pasado por tratamientos, largas esperas y pérdidas mudas. Quienes guardan en el cuerpo y en el alma un deseo profundo que no llegó a cumplirse. Para ellas (y sus parejas), el Día de la Madre puede remover emociones punzantes más que celebraciones alegres y superficiales, puede doler mucho más que resplandecer. Y ese dolor merece ser reconocido, no silenciado.
También están quienes han perdido a sus madres. Quienes atraviesan este día con tristeza y con un nudo en el pecho, mezcla de amor y de nostalgia por la ausencia. Para ellas, este día puede ser una oportunidad para recordar y homenajear lo vivido, pero también una fecha difícil de sostener. Y necesitan espacio para recordar sin presión, sin tener que celebrar este día señalado en el calendario si no les nace. Hay mujeres que han sido madres y han vivido el duelo más devastador: perder a un hijo. Mujeres que cargan con una historia invisible. Para ellas, este día puede ser profundamente difícil e imposible de soportar.
La maternidad no es una experiencia única ni lineal. Es diversa, compleja e íntima. Hay maternidades biológicas, adoptivas, deseadas, interrumpidas, simbólicas o comunitarias. Y todas ellas forman parte de un entramado humano que necesita menos juicio y más compasión. Porque lo que celebramos, en el fondo, no es solo el rol de ser madre, sino la capacidad de cuidar, de dar y de estar. Y hay muchas madres no-madres que lo hacen a la perfección con todas las personas que tienen próximas que se han podido sentir benefactoras de sus mimos y sus desvelos.
Por eso, en este Lunes Mindful, queremos abrir espacio a todas esas voces que muchas veces se quedan fuera del relato oficial. A todas las mujeres que, de una forma u otra, se vinculan con la maternidad con amor, con heridas, con gratitud y, a veces, con contradicciones. Validar todas esas experiencias también es una forma de cuidar. En un mundo en el que no podemos malgastar lo más importante que existe en nuestras vidas: el AMOR con mayúsculas.
Porque la maternidad no debe ser una imposición, ni un mandato, ni una única forma de ser mujer. Que este día nos invite, más allá del homenaje, a la empatía. A mirar con respeto y ternura la historia que cada mujer lleva consigo.
Cita de la periodista y escritora Begoña Gómez Urzaiz, de su libro “Las Abandonadoras”, de 2022. En este ensayo la autora explora la maternidad analizando casos de madres a través de una mezcla de reflexiones personales y relatos biográficos de mujeres reales y de ficción, ofreciendo una mirada profunda sobre la culpa, la crianza y la figura de la madre en general.
Ilustración del libro “The Menino: A Story Based on Real Events”, de 2015 (El Menino: una historia basada en hechos reales, de la autora e ilustradora argentina Marisol Minseta, más conocida como Isol)
Sugerencia: Meditación n. 1 – “Meditación de la Respiración”.
Esta meditación es el punto de partida más rápido y eficaz para practicar la atención plena. La respiración actúa como un ancla, como un centro de paz dentro de nosotros mismos, que aumenta la estabilidad de nuestra mente, nos ayuda a tomar distancia de nuestros pensamientos y sirve para desarrollar la concentración. Buena práctica…